ESPERO QUE OS GUSTE

..."MÁS VALE UNA SONRISA TRISTE, QUE LA TRISTEZA DE NO VOLVER A SONREIR"...

"Todos los artistas tienen en común la experiencia de la distancia insondable que existe entre la obra de sus manos, por lograda que sea, y la perfección fulgurante de la belleza percibida en el fervor del momento creativo: lo que logran expresar en lo que pintan, esculpen o crean es sólo un tenue reflejo del esplendor que durante unos instantes ha brillado ante los ojos de su espíritu". (Juan Pablo II)

viernes, 22 de julio de 2022

ACCESORIO IMPRESCINDIBLE Y VALIOSO: EL ABANICO



...y con el calor que hace en estas fechas no nos vendría nada mal. Incluso lo hemos echado de menos más de una vez al salir a la calle.
¿Pero sabíais que la historia del abanico tiene un origen muy remoto?

Los primeros inventos creados para "hacer viento" son los llamados flabelos (flabellum), y era unos abanicos muy rígidos y grandes que aparecen en las representaciones artísticas asirio-babilónicas, egipcias, pesas, griegas y romanas.

Pero el abanico pequeño y de uso personal más cercano a lo que hoy conocemos es más reciente y procede de las civilizaciones del Extremo Oriente. 
Para los japoneses, la invención del abanico plegable se remonta al 763 d.C, cuando una mujer improvisó el primero al doblar una hoja para aliviar las penas de un enfermo internado en un convento budista.
Los abanicos orientales más antiguos se realizaban con hojas de palmera, planchas de madera muy fina, trozos de tejido, filamentos de papiro o incluso con láminas de metal.

En Europa, hasta el siglo XIII era destinado al uso litúrgico; sobre todo para refrescar al celebrante y para ahuyentar las moscas del cáliz eucarístico.

A partir de entonces se convierte en accesorio femenino, constituído por una pequeña pantalla de plumas o de tela sostenida por un mango fijo de marfil o de algún metal de valor, y colgado en el vestido o a la muñeca mediante una cadenita.
Enrique VIII introdujo los primeros abanicos en Inglaterra durante el siglo XVI, y Catalina de Médicis fue la que los llevó a Paris en 1533, cuando dejó Florencia para casarse con el futuro Enrique II de Francia.

En Europa, a partir del siglo XVI, y gracias al aumento del comercio con Oriente se extendió el modelo plegable realizado uniendo varillas con una cinta (el abanico brisé) o manteniendolas unidas según el modelo llamado "de varillas superpuestas"; este tipo estaba constituido por una superficie llamada "país" de papel, tela o piel adornada con las mas diversas decoraciones, y se sostenía mediante varillas de diversos materiales.
Sus decoraciones se inspiraron al inicio en los modelos orientales y de grandes maestros de la época, dado al gran entusiasmo que causaron. En el siglo XVIII, en Francia, se realizaron ejemplares refinados y lujosos, al igual que en Venecia: los países de estos abanicos se llenaban de delicadas plumas de ave o de piel de cabritilla, mientras las varillas eran de materiales raros como el hueso de ballena, marfil, nácar, concha de tortuga carey o las maderas perfumadas. La decoración pictórica era confiada a autenticos artistas que usaban los dibujos de los más célebres maestros, Francois Boucher, Jean-Baptiste Greuze, entre otros.
Con la Revolución Francesa se inició el declive de los ejemplares refinados, que dejaron sitio a los más sencillos pero también más ilustrados si cabe.

Para proporcionar unas reglas precisas a los artistas comprometidos en su producción, en 1678 se fundó en Francia la corporación de los fabricantes de abanicos (sí, como leeis). Las muy severas leyes de este sindicato imponían a los fabricantes ocuparse sólo de la pintura del país, dejando todas las otras actividades (talla, curtido de la piel y orfebrería) a los artesanos competentes. Es gracias a esta ley que las ilustraciones de los abanicos del siglo XVIII se convirtieron en un verdadero arte.
En este periodo el país de los abanicos se encerraba en un marco dorado, normalmente muy rico, pintado con purpurina o pan de oro; y los abanicos más apreciados estaban pintados por ambas caras.


Después de conocer esto sobre estas preciosas joyas seguro que ahora las vemos con otros ojos.